Comentario
La vestimenta de los antiguos habitantes de Egipto apenas evoluciona a lo largo de miles de años, presentando unas carcaterísticas comunes. El cálido clima empuja a que las prndas san ligeras y frescas, por lo que el lino es el material textil más utilizado. Carecían de cortes y eran envolventes, por lo que su único detalle eran ligeros pliegues. El color habitual era el blanco.
Los hombres vestían un faldellín que llegaba hasta la rodilla. Los trabajadores iban desnudos o llevaban un ligero paño de lino, tipo "slip". En el Imperio Medio se generalizó el uso de una falda más larga sobre la corta, mientras que en el Nuevo aparecen los pliegues. El torso se cubría con una especie de túnica con aperturas en los laterales y en la parte superior para sacar los brazos y la cabeza, existiendo algunas con mangas.
Las mujeres portaban un ajustado vestido desde el pecho hasta el tobillo, aunque también aparecen muestras de vestidos amplios y con mangas. En el Imperio Nuevo se mantuvo el vestido ajustado, pero más bien como ropa interior, cubriéndolo con una plisada túnica que se adornaba con una cenefa.
La peluca era uno de los elementos principales de la indumentaria, ya que tanto hombres como mujeres solían afeitarse la cabeza. Estas pelucas eran realizadas con cabello natural y fibra vegetal. Los pelos no eran muy queridos en Egipto, por lo que el afeitado de todo el cuerpo era algo habitual, utilizando navajas o pinzas, de las que se han conservado diversos ejemplos.
Los ungüentos serían muy solicitados por los egipcios y egipcias, entre todas los grupos sociales. No debemos olvidar que vivían en una zona casi desértica, donde los vientos son muy potentes. El empleo de aceite evitaba irritaciones cutáneas y todo tipo de dolencias de la piel. También utilizaban perfumes a partir de flores, semillas o frutos. Los cosméticos serían muy utilizados, destacando las pinturas para los ojos de colores verde y negro, documentadas hacia el 4000 a.C. Se han encontrado incluso recipientes donde guardar las pinturas de ojos, generalmente de piedra o alabastro. La línea alrededor del ojo tenía una función decorativa y protectora, ya que la luz del sol incide de manera diferente con el ojo pintado. Las mujeres de elevada categoría se pintaban los labios y las mejillas de color ocre rojizo, como atestiguan algunas pinturas.
En numerosos ajuares se han encontrado espejos de bronce muy pulido. Además de objeto de tocador, servían para los oficios religiosos y funerarios, al ser comparados con el disco solar. También se han hallado numerosas piezas de joyería, especialmente collares, brazaletes, tobilleras, anillos y pectorales.